La armonización energética de un hogar consiste en explorar la huella energética que pensamientos, emociones y acciones, generadas dentro del mismo, hayan podido provocar un impacto relevante. Un impacto que puede llegar a condicionar la convivencia, la comunicación entre las personas cohabitantes, e incluso, su misión de vida como hogar.
Esta misión de vida genérica para cualquier hogar es dar protección, cobijo y calor a las personas que residen en el interior de su sistema.
Un hogar también tiene su propio centro energético (al igual que el sistema de una persona) y sus canales energéticos sobre los que esta energía fluye para alimentarlo en su totalidad.
Así pues, esta terapia limpia y armoniza, también, esta fuente energética y sus canales, principalmente aquellos que le conectan con la energía de la Tierra y la energía de la Fuente.
Para una buena armonización de una vivienda, completa y profesional, es importante disolver cualquier bloqueo que se haya podido gestar en su sistema energético. Así como, aquellos bloqueos, que este sistema ha tomado en el desarrollo de su misión de vida, de las personas que cohabitan en él.